Había 2 rutas posibles para ir hacia la costa, la que mas nos tentaba es la del Parque Nacional Cajas, pues por lo que leímos los paisajes son bellísimos, lo único que nos preocupa es un poco la altura, pues otra vez mas vamos a pasar por la cúspide de la Cordillera de Los Andes por arriba de los 4200 msnm.
Además queremos hacer noche en el parque y comenzar por la mañana nuevamente, así que nos vamos para Guayaquil por la ruta del Parque.
De Cuenca partimos en la tarde ya que solo haremos unos pocos kilómetros para adentrarnos en el Parque pues nos dijeron donde podemos parar para al otro día retomar el recorrido.
Recorrimos unos 15 km para estacionarnos en un playón frente a una hostería en el mismo comienzo del parque, la zona es abundante en vegetación y hay rios manantiales y lagunas por donde se mire, según nos dijeron hay mas de 200 lagunas. Verán en las fotos que varias veces cruzaremos por el medio de las nubes y gran parte del recorrido lo haremos por encima de ellas.
Nos levantamos temprano y nos encontramos con un paisaje impresionantemente bello, cuando llegamos en la noche no pudimos apreciar nada pues había mucha niebla y llovizna. Si bien sigue por la mañana ahora temprano y con buena luz disfrutaremos del recorrido.
Ya que nuestro vehículo se utilizaba en la llanura no tiene instalado el freno de motor, que es algo que le quitaron pues solo se utiliza en las montañas, y es algo que estamos sufriendo hasta que podamos dar con quien lo reinstale. En nuestro SCANIA venía de fabrica pero se lo han quitado. Este freno lo que hace cuando se acciona es que frena con el motor en las bajadas pronunciadas y aliviana el uso de los frenos.
Por esto, por la niebla, la llovizna es que el recorrido lo hacemos sumamente lentos y cautos, pero esto nos permite apreciar mejor el paisaje. La carretera está muy buena y hacemos varias paradas para apreciar el paisaje, tomar fotos y descansar los frenos.
En el camino se ven algunos refugios de montaña pues en la noche hace bastante frío y por lo general llovizna.
Ya se comienzan a ver las lagunas que componen el parque y nos vamos acercando a las nubes.
Ya pasamos los 4000 metros de altitud, por suerte nadie se apunó esta vez, ya que el recorrido lo hicimos lento.
Se ven manantiales durante todo el recorrido
Paradas para apreciar el paisaje, con un poco de frío por la altura
Subidas y bajadas pronunciadas que nos obligan a velocidades sumamente bajas, aquí a 9 kph
Varias veces atravesamos las nubes
Buenas carreteras dentro de la cordillera
Entramos en las nubes nuevamente
Dentro de las nubes y las montañas se oscureció que parece de noche
En la mitad del Parque hay un pequeño parador-restaurante que tiene esta impresionante vista
Por arriba de las nubes